A menos de tres meses de las elecciones presidenciales en los Estados Unidos, la Generación Z (agrupa a los jóvenes que nacieron a partir de 1994) está mostrando una división ideológica sin precedentes. Mientras Donald Trump, el símbolo del conservadurismo, y Kamala Harris, la figura progresista que conecta con las minorías, se preparan para la contienda, las tensiones políticas se intensifican. Esta brecha ideológica entre hombres y mujeres jóvenes refleja una tendencia corroborada por estudios recientes.
Cuando Donald Trump apareció en el escenario de la Convención Nacional Republicana, durante el mes pasado, sonaba una versión estridente de la canción de James Brown "It's a Man's Man's Man's World". La canción, que atribuye a los hombres la invención de autos, trenes, luces, barcos, juguetes y comercio, no dejó lugar a dudas sobre el mensaje que se quería transmitir. Melissa Deckman, máxima ejecutiva del Public Religion Research Institute y autora de “La ideología política de la Generación Z”, dijo en una entrevista con The Guardian que esta campaña del partido de Trump está enfatizando la necesidad de una figura masculina fuerte, de manera aún más intensa que en 2016.
Deckman, quien ha investigado exhaustivamente las divisiones políticas entre los hombres y mujeres de la Generación Z, ha identificado lo que llama una "brecha de género histórica inversa". Este fenómeno refleja una profunda diferencia ideológica: mientras las mujeres de la Generación Z se inclinan hacia el progresismo, los hombres están adoptando posturas cada vez más conservadoras.
Reacciones en redes sociales
Las mujeres jóvenes son actualmente el grupo que demanda más igualdad y acceso a derechos de la historia de Estados Unidos. Este fenómeno está generando una reacción conservadora, lo que resulta muy visible en las redes sociales. La semana pasada, un tuit de AF Post que exponía la significativa brecha ideológica, desencadenó una avalancha de cuestionamientos masculinos.
Los usuarios que cuestionaron el tuit de AF Post manifestaron que las mujeres eran más fácilmente manipulables emocionalmente y susceptibles de ser instrumentalizadas. Y algunos hasta añadieron que, por este motivo, las mujeres no deberían votar.
Datos que confirman la brecha ideológica
Pero, ¿qué hay detrás de esta división ideológica? Un estudio de Gallup y Walton Family Foundation proporciona algunas respuestas. Según la investigación, los adolescentes de la Generación Z son el doble de propensos a identificarse como más conservadores que sus padres en comparación con los millennials hace 20 años. Esta inclinación es más pronunciada entre los varones y aquellos que se identifican como republicanos.
Los datos muestran que el 19% de los varones de la Generación Z se consideran más conservadores que sus padres, en contraste con solo el 14% de las mujeres. Este cambio no solo refleja una diferencia de género, sino también un posible giro hacia el conservadurismo y el tradicionalismo en una generación que ha crecido en un entorno de cambio constante y rápido.
En el contexto de las elecciones presidenciales, esta división ideológica podría ser un factor decisivo en la elección del próximo presidente de los Estados Unidos. Mientras Trump representa la figura fuerte y conservadora que atrae a muchos jóvenes varones, Kamala Harris resuena con las mujeres y las minorías que adhieren al ideario progresista. ¿Quién ganará? En un país donde votar no es obligatorio y existe el método del colegio electoral, la victoria depende de la capacidad de movilizar a la mayor cantidad de electores en los estados políticamente oscilantes o swing states.
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